Desde su fundación en 1950, FLEXIX ha sido un referente en la industria química del País Vasco, especializándose en el diseño y fabricación de piezas de caucho y elastómeros especiales. Con una visión marcada por la innovación, la flexibilidad y la mejora continua, la empresa ha sabido evolucionar sin perder su esencia: ofrecer soluciones técnicas avanzadas para sectores estratégicos como la automoción, el ferroviario, la electromovilidad y la energía verde.

Lo que comenzó como un pequeño proyecto industrial en Bizkaia en la década de los 50, con un enfoque manual en la producción de componentes de caucho, ha experimentado una transformación radical a lo largo de los años.

En 1958, la empresa dio un primer gran salto al establecer una colaboración con la alemana Kächele, que posteriormente, en 2009, se convirtió en su accionista mayoritaria, aportando su experiencia y visión global del sector.

El compromiso con la calidad llevó a FLEXIX a convertirse en 1996 en la primera empresa española del sector técnico del caucho en obtener el certificado ER ISO 9002 de AENOR. Este hito marcó el inicio de una estrategia basada en la excelencia operativa y la modernización de sus procesos. En 2003, FLEXIX construyó una planta de producción optimizada, equipada con una de las salas de mezcla de caucho automatizadas más avanzadas del mundo. Tres años después, en 2006, la robotización de los procesos productivos consolidó a la empresa como un referente en la automatización industrial del caucho.

Innovación y sostenibilidad

La apuesta por la innovación ha sido una constante en la historia de FLEXIX. Su equipo de ingeniería desarrolla y mejora continuamente mezclas, geometrías, moldes y utillajes con el objetivo de garantizar procesos más robustos y estándares de calidad superiores. Esta filosofía ha permitido que la compañía avance en la digitalización y en la automatización integral de sus líneas de producción, ampliando su capacidad y eficiencia.

La sostenibilidad es otro de los pilares estratégicos de la empresa. Actualmente, FLEXIX trabaja en la revalorización de residuos de caucho para su conversión en nueva materia prima, integrando soluciones más responsables con el medio ambiente en sus procesos productivos.

Además, la diversificación ha sido clave en los últimos años. Si bien la automoción sigue representando un porcentaje significativo de su actividad, la empresa ha expandido su presencia a sectores como la electromovilidad, la energía renovable y la fabricación de componentes para electrodomésticos y equipos médicos.

Un futuro de transformación continua

En 2021, FLEXIX activó un Plan Estratégico con el objetivo de elevar aún más la automatización y fiabilidad de sus procesos. Gracias a esta estrategia, ha logrado avances significativos en la verificación, montaje y acabado de sus piezas, mejorando su competitividad en el mercado global. Entre las últimas innovaciones destaca la implementación de una célula automática para el montaje, grabado y verificación de una familia de conjuntos, con el objetivo de duplicar su capacidad productiva en 2025.

Este 2025, FLEXIX celebra su 75º aniversario reafirmando su compromiso con la evolución tecnológica y la adaptación a las nuevas exigencias del mercado. Su éxito radica en una combinación de experiencia, conocimiento técnico y una visión de futuro centrada en la innovación y la sostenibilidad. Como parte de AVEQ-KIMIKA, FLEXIX continúa fortaleciendo la industria química del País Vasco, demostrando que la tradición y la modernidad pueden avanzar juntas para liderar el futuro del sector.